Su gran centro es una de las grandes atracciones de «La ciudad del árbol», con su gran bulevar y su iglesia ubicada frente a la hermosa plaza principal. También la vieja estación de la trocha es un gran atractivo para esta ciudad. En realidad son 3 bulevares: 2 en la plaza principal, de una cuadra cada uno, y el mayor, que es la Avda. Independencia, que tiene 6 cuadras de extensión.
El poeta Mario J. Grand bautizó a Marcos Paz como el Pueblo del árbol, con un poema. Luego de una gran expansión poblacional, convirtiéndose así en ciudad, se la llama «Ciudad del árbol», muy acertadamente ya que sus calles son caminos de árboles cuyas copas en primavera-verano se juntan haciendo sentir al caminante que transita sus calles como si estuviese dentro de un túnel de árboles.